Transgresora, valiente, feroz, herida, desafiante... imágenes que se suceden y nos golpean de Frida Kahlo. Su pintura es su testimonio: de su lucha, de su sér - con acento como escribía el poeta César Vallejo - enclavada en su tierra y en el tiempo que le tocó vivir. Nació en el año 1907, pero identificada con el nuevo México le gustaba decir que había nacido con la Revolución Mexicana. Su padre fue Guillermo Kahlo, descendiente de judíos húngaros; nació en Alemania. A los 19 años viaja y se instala en México, casándose en segundas nupcias con Matilde Calderón. La tercera de las hijas es Frida, será "la preferida" de su padre. Guillermo Kahlo aprende el arte de la fotografía de su suegro, instalándose como fotógrafo profesional. Esta actividad funcionará para Frida como un razgo que ella extrae y que será eje de su pintura: la serie de auto-retratos que se suceden a lo largo de toda su obra. Con su padre se adentró en el conocimiento de la arqueología y el arte de México y ta
cultura, arte y educación