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Gestor de dos revoluciones (Sophia Rodríguez Pouget)

(Artículo para grupo RAD 101)

Son también 250 años de 2 de las obras más importantes de Rousseau.

Considerado padre de los principios del derecho político, la democracia moderna, el estado civil y la libertad, que marcarían la historia universal, sus planteamientos inspiraron grandes emancipaciones como la Revolución francesa y la Independencia americana.

Como parte de los actos conmemorativos, la Embajada de Francia, con las Universidades Javeriana, Distrital y de Antioquia realizaron un ciclo de conferencias en Bogotá y Medellín. Uno de sus organizadores y ponentes, Adelino Braz, doctor en Filosofía y agregado de cooperación universitaria y educativa de la Embajada de Francia, explicó: "Seguimos recordando y estudiando a Rousseau 300 años después, pues a través de su obra marcó varias de las nociones fundamentales de la modernidad que siguen siendo objeto de reflexión como la de 'voluntad general' o la de 'estado civil' donde existen leyes que permiten a los seres humanos organizarse y vivir en sociedad pacíficamente".

Y continúa: "Rousseau planteó que 'el ser humano nace bueno y la sociedad lo corrompe'. Mientras no convive con otros es inocente, no conoce el bien y el mal. Es en sociedad donde descubre el amor propio, la comparación, la competitividad, la pugna de fuerzas entre unos otros. De ahí la necesidad de 'forzar' a los seres humanos a ser libres, es decir la importancia de vivir en una sociedad civil con leyes jurídicas comunes a todos. Pero ese ser libres no significa que cada quien haga lo que le de la gana, porque eso sería el caos, la guerra y el fin de la sociedad, sino que todos tengamos presente que 'mi libertad termina donde empieza la del otro', otra de sus frases más célebres... Cuando los planteamientos de un autor trascienden la época en la que fueron escritos para continuar vigentes y seguir siendo objeto de reflexión, se vuelven universales y consolidan lo que se denomina una 'obra maestra'. Eso fue lo que logró Rousseau, de ahí la importancia que tiene la celebración mundial de estos 300 años".

A 3 siglos del pensamiento rousseauniano, su obra sigue inspirando nuevas reflexiones y ratificando las que acompañan los ideales republicanos desde el siglo XVIII, como la importancia del concepto de 'voluntad general' y sus precisiones sobre el concepto de 'representación'.

"Rousseau -dice Braz- planteó que el papel del soberano no es 'representar' al pueblo. Es el pueblo el soberano que representa la voluntad general. Y esa voluntad se define como el bien común para todos; un bien que no tiene que ver con cantidad o voluntad de mayorías, sino con la capacidad de determinar un bien común aplicable a todos. Es decir lograr que la ley sea la misma para mí y para el otro y que, a la vez, respete la libertad de los dos".

Toda la generación de próceres y precursores de la independencia americana, sus principales idearios y líderes, como Simón Bolívar o Antonio Nariño, fueron también fervientes seguidores de los filósofos franceses de la Ilustración e influenciados fuertemente por los conceptos de Rousseau. "Bolívar, por ejemplo -explica Braz- fue educado esencialmente bajo los preceptos de Rousseau por su profesor Simón Rodríguez, quien le inculcó los conceptos de libertad, igualdad y fraternidad de la Revolución Francesa y los preceptos del 'Emilio, o de la educación', que serían determinantes después para sus ideales de Independencia. Aquello de que el hombre es libre y debe liberarse de las cadenas que lo rodean despertaron en el joven Bolívar la conciencia de libertad, voluntad general y ser soberano, que motivarían en buena parte su gesta libertadora".


Por Sophia Rodríguez Pouget
FUENTE: ELTIEMPO.COM Lecturas Dominicales- 29 de Agosto de 2012.

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